Es de los bizcochos más ricos que he comido, y a su vez de los más esponjosos, una delicia.
Ingredientes:
375 gr de calabaza asada
375 gr de azúcar
375 gr de harina
5 huevos
3 papeles de gaseosa blancos
3 papeles de gaseosa azules
105 gr de aceite de girasol
Piñones y azúcar espolvoreada por encima
Preparación:
En primer lugar asamos la calabaza en el horno envuelta en papel de plata o si queremos hacerlo de la manera rápida, la asamos en el microondas partida en trozos gruesos con piel y tapada durante 15 minutos. Eso si, en el microondas sin papel de plata, ya sabéis que no se puede usar en él.
Yo la asé en el horno porque lo tuve encendido toda la tarde ya que estuve haciendo más cosas. Como mi horno es de aire aproveché para poner varias cosas a la vez y asi asé la calabaza mientras, e hice la coca en último lugar.
Esta es la calabaza asada:
Una vez asada le quitamos las pepitas y la piel y trituramos 375 gr. con una batidora. Reservamos.
Ponemos 5 huevos cascados en un bol con los 375 gr. de azúcar y los batimos hasta que al menos hayan triplicado su volumen y estén blanquecinos y esponjosos. En ese momento vamos agregando los 105 gr. de aceite poquito a poco para que no se baje la mezcla.
Añadimos la calabaza también poquito a poco y seguidamente los papeles de gaseosa. Es recomendable utilizar un bol bastante grande ya que los papeles de gaseosa levan mucho la masa antes de meterla en el horno y se nos puede salir del bol.
Tamizamos la harina y la vamos agregando poco a poco envolviendo la masa con una espátula y girando el bol al lado contrario, es muy fácil y asi veréis como no se baja nada la masa, queda esponjosa y asi una vez cocida también lo estará.
Ponemos la masa en una bandeja rectangular para coca o en una rustidera (este es mi caso, yo la forro con papel de horno), espolvoreamos los piñones y el azúcar por encima y la metemos al horno precalentado a 180ºC durante 35 minutos.
Pinchamos para comprobar que este bien cocida y esperamos que este fria para desmoldarla.
* Los papelillos de gaseosa los encontraréis en el Mercadona al lado de las levaduras y las harinas. Son ideales para magdalenas y bizcochos, los dejan mucho más esponjosos que la levadura química.